Superadobe: construcción ecológica

El superadobe es una técnica de construcción sustentable de bajo costo, inventada por el arquitecto iraní Nader Khalili.

Superadobe: construcción ecológica
Sistemas constructivos con superadobe.

Guadalajara, Jal. (@ambientalJAL). Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (industria, innovación e infraestructura) impulsan el diseño de vivienda con procesos sostenibles y de calidad para países en desarrollo con el propósito de mejorar la calidad de vida.

El superadobe es una técnica de construcción sustentable de bajo costo, inventada por el arquitecto iraní Nader Khalili.

“Khalili era un arquitecto exitoso; llevaba mucho tiempo trabajando en Estados Unidos para grandes empresas, diseñando rascacielos y diversas edificaciones para gente que no tenía ningún límite de presupuesto. Sin embargo, llegó un momento en su vida en que entró en crisis, ya que sintió la enorme necesidad de hacer algo por la gente común, aquella que más sufre por la falta de acceso a la vivienda”,

menciona Natalia Stettner, quien es estudiante de antropología y se dedica a la construcción con superadobe.

Natalia es especialista en Guadalajara en técnicas constructivas con superadobe.
Esta problemática es especialmente tangible en Los Ángeles, ciudad donde él (Khalili) vivía, ya que en esta urbe existen múltiples y extensas micro-ciudades conformadas por miles de personas en situación de calle. Simplemente se estima que el 20% de los estudiantes a nivel universitario que residen en ésta ciudad no tienen dónde vivir. Esta situación lo llevó a buscar alternativas que le brindaran a la gente vivienda digna, segura, y a un precio accesible.”
“La técnica del superadobe está inspirada en la arquitectura de Medio Oriente, en especial en la arquitectura persa. Los persas construían sus edificaciones con tierra, y a pesar de que han transcurrido miles de años, dichas edificaciones aún siguen en pie. Ellos también recurrían mucho a la construcción de arcos, domos y bóvedas, ya que son de las formas más estables y resistentes que se encuentran en la arquitectura . Es lo mismo con el superadobe: se construyen domos y bóvedas utilizando la tierra como material principal. Gran parte de la construcción natural consiste en voltear al pasado, buscando así rescatar los conocimientos milenarios que tantísimas culturas aplicaron satisfactoriamente durante tantos años.”, comenta Stettner.

La técnica superadobe consiste en la construcción de domos, para lo cuál se utilizan costales rellenos con tierra a manera de ladrillos. Además de la tierra, también se utilizan agua y, en algunos casos, una mínima cantidad de cal o de cemento (de 5 a 10% de la mezcla total), la cuál funge como estabilizador. Entre cada capa de costales se coloca alambre de púas, el cuál funciona como mortero, evitando así que los costales se deslicen. Para la construcción con superadobe se puede utilizar tierra de cualquier sitio, siempre y cuando ésta contenga entre 5 a 40% de arcilla.

La construcción con superadobe representa ahorros de aprox. 40% comparación con técnicas convencionales.

Las ventajas constructivas se reflejan en el costo, ya que esta técnica representa un ahorro de al menos 40% en mano de obra y materiales, en comparación con las técnicas convencionales. En su construcción se emplean materiales accesibles y fáciles de encontrar, como lo son la tierra, los costales de polipropileno (los que se usan regularmente en la industria), y el alambre de púas. Es una técnica mucho más amigable con el medio ambiente, ya que emplea una cantidad mínima de cemento (cuya fabricación genera grandes cantidades de CO2), y no requiere del uso de varillas, vigas, ni de castillos. Además, el superadobe es muy fácil de aprender y está al alcance de todos, ya que cualquiera puede participar en su construcción, aún sin contar con conocimientos previos en albañilería o de arquitectura.

Otra gran ventaja que presenta el superadobe, es que las estructuras que se construyen con esta técnica son resistentes a los terremotos, a los incendios y a los huracanes. En diversas partes del mundo se han otorgado los permisos de construcción con esta técnica, incluso en lugares en donde las pruebas de calidad son sumamente estrictas. Tal es el caso del estado de California, en donde el superadobe pasó todas las rigurosas pruebas antisísmicas que el estado exige. También se habían construído muchas casas de superadobe en Nepal, previas al terrible terremoto que devastó el país en el 2015: ninguna de estas fincas sufrió daño alguno a causa del terremoto, a pesar de que todas las construcciones hechas con métodos convencionales que estaban en el área fueron destruidas.

Natalia forma parte del equipo CalEarth e imparte talleres de construcción en Jalisco.

¿Qué problemática de vivienda (desarrollo urbano) has identificado en Jalisco?

En muchas ocasiones las viviendas de asistencia no cumplen con los reglamentos básicos de construcción, lo cuál se traduce con el tiempo en daños estructurales serios. Esto lo observamos durante la pasada serie de terremotos que azotó diversas zonas del país, en donde miles de personas perdieron su hogar e incluso su vida. No obstante del riesgo que estas viviendas representan para sus habitantes, al comprar dichas fincas los propietarios terminan pagando intereses altísimos a lo largo de muchas décadas, lo cuál dificulta el ahorro. Todo para acabar con una propiedad que difícilmente se podrá dejar como patrimonio para las generaciones venideras.

¿Ideas para mejorar la planeación urbana (de vivienda) en Jalisco y otros municipios del estado con este proceso constructivo?

Se deberían de tomar en cuenta las necesidades de las personas, tales como la falta del agua, que en muchas comunidades ya empieza a ser un gran problema. Este problema se podría solucionar con la implementación de techos que capturen el agua de la lluvia, por ejemplo, así como con la reutilización del agua, la filtración de la misma a través del uso de viveros, y el uso de los baños secos.

“También sería muy benéfico pensar y planear a escala comunitaria, es decir: si tu vecino cultiva jitomates, a lo mejor uno podría tener gallinas, y otro podría tener árboles frutales, y así. De esta forma se cubrirían las necesidades de toda la comunidad por medio del trueque, y esto mejoraría la economía de la misma al reducir los costos de producción y de envío. Esto se ha venido empleando satisfactoriamente en varias urbes de Europa, en donde los vecinos mantienen un jardín comunitario que cuidan entre todos. Esto también genera espacios de recreación, de expresión artística y cultural, y mucha unión entre los vecinos, lo cuál fortalece el tejido social; algo sumamente necesario en nuestra época para combatir los altos niveles de violencia y de inseguridad que padecemos diariamente.”